sábado, 28 de febrero de 2015

Día 8: Frutillar- Puerto Octay- Ancud

Frutillar parecía de día Domingo. No andaba nadie más que un par de personas en la playa. Llegué a esperar la micro a Puerto Octay a las 10:05. No pasaba, no pasaba, no pasaba.

Pensé en devolverme al camping, pero tenía que terminar el Circuito Llanquihue, al menos visitando los lugares más grandes entorno al lago.

Estuve ahí por hora y media cuando empezaron a llegar más personas a esperarla. Parecía ser que todos sabían que la micro pasaba a las 12, menos yo. La micro pasó finalmente a las 12:12.

El camino a Puerto Octay es como sacado de La Pequeña Casa en la Pradera, con varias iglesias lindas a la orilla del camino, pero el lago escondido. Cuando llegamos al mini terminal de Puerto Octay le pregunté al chofer a qué hora salían las micros de regreso. Me dijo que a las 13:30, 16:00 y 18:00,  miré la hora y eran las 12:48. 

Bajé a la playa pero no había playa, fui hasta el otro costado a ver si había una bajada al lago, pero nada. Entonces empecé a pensar en qué haría hasta las 4 de la tarde metida ahí. De seguro no estaba buscando bien.

Puerto Octay

Me devolví al terminal y detrás de él estaba la plaza de armas. Hermosa y bien cuidada. En una de las esquinas estaba la Quesería Octay, empresa símbolo del pueblo. Eché una mirada rápida a ver si encontraba más lugares para visitar, pero nada. Saqué unas fotos rápidas a la plaza y decidí que no podía quedarme ahí, y que tomaría el bus de las 13:30. Había cumplido la misión.

Plaza de Armas de Puerto Octay


Le compré una empanada a una señora del kiosko (nivel dióh) y tome la micro de vuelta. 

Llegué a Frutillar a desarmar la carpa. Esa noche debía estar en Ancud y mientras esperé la famosa micro a Puerto Octay, había leído que los incendios forestales entre Puerto Montt y Pargua estaban reduciendo la visibilidad heavymente y provocando choques múltiples. Hablé con Caro por lo mismo; el panorama era incierto. La misión era llegar a Puerto Montt y ver que me decían. 

Tomé la micro y desde el tramo Puerto Varas- Puerto Montt vi al menos 4 focos de incendios, pero en Puerto Montt tomé pasaje sin problema. 

Llegué a Ancud a las 20:00 hr, dejé mi mochila en custodia y di una vuelta por el centro. En la plaza de armas estaba todo el mundo. Pasé a conocer la catedral por dentro. Es muy distinta al resto de las iglesias de la isla. En un costado habían fotos de la antigua catedral, sus transiciones y el edificio actual. Antes del terremoto de Valdivia, la catedral era hermosa, hermosa, HERMOSA, pero la demolieron porque los daños fueron muy grandes. 


Compré papas fritas y me devolví al terminal. Al poco rato llegó Caro desde Castro.

Dejamos las cosas en el hostal y salimos a comer y tomar michelada. Esa noche era la noche caleuchana. Entramos al local que estaba al lado del escenario, pero cuando salimos de ahí ya no quedaba nada. 

Buscamos otro bar y llegamos a uno donde había karaoke. Una semi señora se puso a bailar y cantar sobre la barra mientras nosotras tomábamos nuestras piñas coladas.

Circuito Lago Llanquihue, Puerto Octay: tickeado

Carretear en Ancud: tickeado